Sanar la autoestima
La autoestima es la imagen que la persona tiene de sí misma, su manera de valorarse física, emocional e intelectualmente.
Este sentimiento de valía personal es muy importante, ya que es la base del comportamiento de la persona: como se relaciona, se cuida y se enfrenta a la vida. De este modo, quien tiene una buena autoestima, es capaz de asumir nuevos retos apreciando sus capacidades y comprendiendo sus limitaciones. Y por lo tanto, se sentirá orgullosa de sus logros y aprenderá de sus errores para mejorar en el futuro, pudiendo alcanzar cualquier meta que se proponga. La baja autoestima surge cuando la persona se exige ser como cree que debería ser o como piensa que los demás quisieran que fuera. Al no aceptarse a sí misma desconfía de sus propias habilidades y, antes de empezar, ya siente que va a fracasar, lo que le impide lograr sus objetivos vitales. Por ello se autocastiga, focalizándose en sus defectos y exigiéndose un nivel de perfección inalcanzable. Debido a esta inseguridad tendemos a compararnos con otras personas y a darle mucha importancia a la opinión de los demás, menospreciando la nuestra. Este sentimiento de inferioridad junto al miedo al rechazo, dificultan las relaciones personales, pudiéndote hacer sentir sol@ y poco querid@. Para superar este círculo vicioso es primordial pedir ayuda. La terapia te brinda la posibilidad de descubrir quién eres en realidad, con tus defectos y tus virtudes. Al mismo tiempo, aprenderás a combatir los mensajes negativos que te dices y comenzarás a valorarte, para recobrar la confianza en ti. Los síntomas más característicos de una autoestima baja son:
Recuerda, dentro de ti hay una extraordinaria persona deseando mostrarse. |
Beneficios de una sesión:
✓ Aumentar tu seguridad en ti ✓ Vencer tus miedos y la ansiedad ✓ Relacionarte con mayor confianza ✓ Aprender a quererte y valorarte Cuéntame. En qué puedo ayudarte?
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